La Madre Abadesa Serendipia estaba meditando en el pabellón del patio. Exudaba un aura etérea en su largo vestido blanco.Había una silueta en la puerta del patio asomándose con una sonrisa malvada. Era Florian Darby.Desde que las hermosas seguidoras de la secta Emei se mudaron a la mansión de al lado, él esperaba tener un encuentro memorable con ellas. Sin embargo, la Madre Abadesa Serendipia y las demás rara vez abandonaban la mansión. Estaban en el patio en la mayoría de su tiempo.Florian no se atrevió a desobedecer las órdenes de su abuelo, así que se paró junto a la cerca para mirar adentro. De repente, se le ocurrió una idea.La Madre Abadesa Serendipia vio a Florian. “Señor Florian”, ella saludó cortésmente. “¿Puedo ayudarlo?”.“Madre Abadesa Serendipia, lamento molestarla”, se rio con sinceridad. “Estaba pensando... Dado que el Festival del Medio Otoño se acerca en dos días, me gustaría invitarla y a las seguidoras a comer en nuestro lugar”.La Madre Abadesa Serendipia

Xavier King era un Maestro General Nivel Cinco de la secta Kunlun.Su mayor problema era que él era un pervertido. Codiciaba a las mujeres. Se fijó en Lily e Yvonne el primer día de clases e intentó acercarse a ellas.No estaba contento de que las dos estaban tan cercas de Darryl, así que le lanzó el balón sin pensarlo dos veces.“¡Lo siento mucho, el balón se resbaló!”, Xavier sonrió.“Está bien”, respondió Darryl con indiferencia.Xavier recogió el balón y regresó a la cancha.Darryl continuó su conversación con Circe. “Muy bien, hablemos de dónde comer después de la escuela”.La belleza de la escuela le estaba invitando a comer. Sería tonto no aceptar.Cuando Circe se fue, vitoreó en silencio, sin mostrarlo exteriormente. Ella mantuvo su habitual compostura helada.Lily enganchó su brazo alrededor del brazo de Darryl y preguntó, “¿Por qué se está disculpando contigo? ¿Por qué te está invitando a comer?”.Yvonne también tenía curiosidad. Después de todo, Circe era la bellez

Katherine respiró hondo antes de continuar, “Las posibilidades de dominar estos manuales son solo una entre mil. Por lo tanto, no te hagas ilusiones de dominarlos en esta ocasión”.¿Qué tan difícil podría ser?Darryl frunció el ceño. “Señorita Katherine, ¿cuándo puedo entrar?”, preguntó.“Puedo llevarte allí ahora mismo”, ella respondió.“Señorita Katherine, por favor espere aquí un rato”, interrumpió Darryl. Corrió hacia Circe con una mirada de disculpa en su rostro.“Circe, lo siento mucho”, se disculpó, “tengo un asunto con la Señorita Katherine. Parece que no podré comer contigo. ¿Podemos posponerlo para otra ocasión?”.Comer con una mujer hermosa era tentador, pero ¿quién podría resistirse a dominar los manuales de una de las Seis Sectas Ortodoxas?“Está bien”. Circe asintió con tristeza y respondió sin rodeos. ¡Ningún hombre la ha rechazado jamás! Darryl era el primero.Media hora después, Darryl siguió a Katherine a la biblioteca. La campana de la escuela acababa de sona

Granny Lyndon lucía completamente avergonzada.“Madre, detente...”, Lily suplicó suavemente.Lily continuó, “Abuela, ¿cómo quieres que te ayude?”.Granny Lyndon y William se miraron. “Lily, si nos das algo de dinero para ayudar al negocio familiar a superar esta mala racha, estaremos agradecidos”, ella sonrió.William agregó, “Por supuesto, te daremos algunas de las acciones”.Lily permaneció en silencio pensando profundamente.Samantha continuó sus insultos. “¡Qué gente tan desvergonzada! ¿Olvidaron que algunas de esas acciones eran suyas? Se las arrebataron. Ahora que se han quedado sin dinero, vienen corriendo hacia nosotras”.“¡Madre, basta!”, Lily espetó, rompiendo su silencio. Miró a Granny Lyndon y estuvo de acuerdo, “Bien, estoy de acuerdo con tus términos”.Ella todavía tiene decenas de millones con ella. Si lo conservaba por más tiempo, desaparecería debido a la adicción a las apuestas de Samantha. Preferiría gastarlo a cambio de algunas acciones. Sin embargo, estaba

El adivino pensó en una solución. “Para romper tu racha de mala suerte es simple”, explicó. “Solo elige un buen día para casarte”.¿Matrimonio?Megan se quedó atónita, luego se dio cuenta. Ella se sonrojó.El adivino continuó, “Me acabo de dar cuenta de que este hombre a tu lado tiene el elemento agua en él. ¡Ustedes dos hacen una combinación perfecta! Ambos son una pareja, ¿supongo?”.Megan se sonrojó mientras asentía.El adivino se rio y se dio una palmada en el muslo. Fingió calcular con los dedos y exclamó, “¡Eso es perfecto! En los próximos seis meses, habrá dos buenos días para tener una ceremonia de boda. ¡Felicitaciones a la pareja de recién casados ​​por adelantado!”.Ante eso, el adivino dejó escapar un suspiro de alivio en voz baja. Completó su misión.Kent sonrió ampliamente. Aprovechó la oportunidad para sacar una caja de su bolsillo y se arrodilló sobre una rodilla. “Megan, cásate conmigo”. Abrió la caja para revelar un anillo de diamantes. Brillaba bajo las linter