Capítulo 2771
Sebastian dejó la alcancía a un lado y preguntó con preocupación: "¿Qué pasa? ¿Necesitas dinero? ¿La mesada que tu mamá y yo te damos no es suficiente? ¿Por qué quieres abrir tu alcancía? Una vez abres esta alcancía, ya no la puedes cerrar".

Sebastian todavía recordaba que esta alcancía de Aino fue lo que Minerva le trajo cuando regresó al país el primer año que se fue al extranjero a estudiar. La persona que Aino más admiraba desde que era una niña era su Señorita Minerva. ¿Cómo podría soportar romper la alcancía que le regaló Minerva?

Aino asintió con seriedad. "Bueno, no es necesario. Solo quiero sacar el dinero".

"Dime, ¿para qué vas a usar el dinero después de haberlo sacado?", preguntó Sebastian.

"Una niña de mi clase tiene… leucemia. Su familia ya ha gastado cientos de miles de dólares en su tratamiento. No tienen dinero. Estaba pensando en darle algo de dinero", le dijo Aino a su padre con honestidad.

"¿Cuánto quieres darle?", preguntó Sebastian.

"Tengo casi diez mil
Continue to read this book on the App

Related Chapters

Latest Chapter