Capítulo 125
Los hombres se sorprendieron por la reacción de Megan.

La evaluaron: Tacones altos, camisa blanca y una falda ceñida al cuerpo. ¡Ella era tan hermosa como una estrella de cine!

“¡Soy policía! ¡Dejen sus armas!”, Megan dijo con frialdad.

¿Policía?

La expresión de los hombres se oscureció. Intercambiaron miradas y luego rodearon a Megan.

A Darryl le dolía la cabeza. Esta mujer no tenía ningún arma, ¿y aún así se atrevía a enfrentarse a ellos?

Se dio una palmada en la frente y luego se arrastró silenciosamente hacia ellos.

“¡Hermanos, átenla!”, aulló el líder. ¡Esto era un regalo inesperado! Ella era demasiado hermosa.

Los hombres sonrieron diabólicamente y se acercaron a Megan con una cuerda.

‘Esta mujer es tan problemática’, pensó Darryl. Suspiró y corrió hacia adelante.

“¡Megan, cuida del resto, yo me ocuparé de los ladrones!”, gritó Darryl. Golpeó al primer ladrón en la cara, quien apenas pudo reaccionar. Su cuerpo salió volando y se desmayó.

¡¿Qué?! ¿Dejar incons
Continue to read this book on the App

Related Chapters

Latest Chapter