Capítulo 468
En medio de la noche, Christopher estaba detrás de las ruedas con Kenneth y sus dos guardaespaldas y se dirigió rápidamente al Hospital Alas Plateadas.

Kenneth ni siquiera esperó en la cola, sino que irrumpió en una de las salas de urgencias con sus guardaespaldas.

Cuando vio a un médico sentado frente al ordenador, se desabrochó el cinturón y se quitó los pantalones.

El médico se quedó extremadamente sorprendido.

"Oye, ¿qué estás haciendo? ¿Estás loco?".

El médico gritó horrorizado: "¡Vuelve a ponerte los pantalones o llamaré a la seguridad!".

Nadie podía soportar una escena tan extraña en medio de la noche.

Kenneth se apresuró a explicar con una miserable mueca: "Doctor, me ha entendido mal. No estoy loco. ¡Algo horrible le ha ocurrido a mi cuerpo! ¡Apresúrese y eche un vistazo! Ayúdeme, si no, se pudrirá".

El malestar se había agravado en ese momento.

El médico se miró el pene y tomó una bocanada de aire frío. Murmuró lentamente: "Um... su pene está completamente necrótic
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