Día gris La sonrisa de Scott se anchó en su rostro, el hombre caminó alrededor de Blake como si fuera una fiera burlándose de su presa.—¿Cuánto tiempo sin vernos? —preguntó.—Te diría que es un placer volver a verte, pero será una mentira. Eres despreciable —gruñó Blake con desprecio.El magnate no podía olvidar los años que vivió engañado y el colmo fue Cherry, esa maldita cereza había estado de parte de Scott todo ese tiempo, era ella quien lo mantenía informado de los movimientos de la oficina. ¡¡¡Ella lo había drogado!!!Blake juraba que, si salía vivo, iba a despellejarla viva. Era lo menos que esa mujer se merecía por traicionarlo de aquella manera y hacerlo el día más importante para la vida de su hijo; recordar que Matthew lo esperaba en la cancha de fútbol hizo que el enojo se incrementara, era claro que la intención de Scott no era otro sino herir a Matthew.—Tan orgulloso como siempre —espetó Scott.—Sabes que eso es mentira, nunca me comporte ni orgulloso, ni arrogante
Hombre equivocadoBlake quería correr como un loco para salir de ahí, pero sabía que las cosas no eran así de fáciles y simples, todo esto era un proceso y debía esperar a que la ambulancia viniera para llevarse a Connor, que se había jugado la vida para mantenerlo a salvo.—Señor Cameron —habló el oficial, Blake se puso de pie y se alejó unos pasos de Connor, tiempo que dos policías aprovecharon para tomar al chico de los brazos, él gruñó ante la presión en su herida.—Mi guardaespaldas necesita una ambulancia —señaló Blake al darse cuenta de que las intenciones eran llevarlo preso.—¿Es su guardaespaldas? —preguntó el oficial con el ceño fruncido.—Lo sé —aseguró.El oficial hizo un movimiento de cabeza, los hombres dejaron en libertad a Connor, Blake se quitó la playera deportiva que llevaba y se la colocó sobre la herida del muchacho para frenar la sangre que seguí saliendo de manera escandalosa.—Tiene que venir con nosotros —habló de nuevo el oficial—. Tiene que levantar la denu
Chelsea se acercó a Larry luego de aquella revelación.—¿Estás bien? —le preguntó en tono bajo.—Sí, en realidad, no me sorprendería si lo fuera, mi padre amó a mi padre tanto que aceptó cargar con su crimen, pero antes de ella, su vida no fue mejor. Las drogas y el alcohol fueron siempre su perdición —respondió.Chelsea apretó su hombro con fuerza en señal de apoyo incondicional.—Sabes que una prueba de ADN puede sacarte la espinita, puedes pedirle al abogado que la solicite —le sugirió.Larry asintió, aunque saber la verdad no cambiaba nada, él y Scott jamás se habían caído bien y el ser hermanos no cambiaría en nada la aversión que sentía un por el otro, en caso de que lo fueran, Larry tenía dudas, pero Chelsea tenía razón podía averiguarse fácilmente si tenían o no la misma sangre.—Tengo que ir a la estación de policía a rendir mi declaración —avisó Blake.—Iré contigo, tenemos que hablar sobre Cherry y las pruebas que la incriminan con tu secuestro —informó Larry.—¿Hay pruebas
Aquella noche Blake volvió a casa seguro de que Scott y él no eran hermanos. Esa noche Blake se concentró en su pequeña familia; Matthew ya lo esperaba para mostrarle el video que James había grabado para él, luego de vivir aquella emocionante segunda parte, y luego de ver cómo Matthew había festejado el gol, Blake dio gracias al cielo por tener la dicha de seguir compartiendo con su hijo, la oportunidad de volver, ya que ese día él pudo haber muerto.—¿Estás llorando? —preguntó Matthew una vez que el video se detuvo.—Creo que me ha entrado un balón y una celebración muy especial al ojo —musitó él sin ocultar las lágrimas de emoción y amor que le corrían por las mejillas.Matthew rio al escuchar a su padre.—Un balón es muy grande para entrar en tu ojo, papá —refutó.Blake no respondió, en su lugar abrazó a Matthew, lo estrechó contra su pecho y volvió a agradecer, esta vez por tener la oportunidad de tener a su hijo, algo que él no consideraba que merecía luego de todo lo que hizo.
¡Se ha movido!Scott fue llevado a su celda, el hombre guardó silencio por mucho tiempo, estaba en shock, luego de descubrir que no era hermano de Blake Cameron, que las palabras de su madre fueron una mentira. Scott Carter se derrumbó en el frío piso de la prisión y gruesas lágrimas cayeron de sus ojos al darse cuenta de todo lo que había perdido.El hombre hizo un rápido viaje en el tiempo, desde aquella primera vez que se encontró con Blake en la universidad, de todas las veces que le siguieron y como poco a poco fue dándose su relación de amistad.«Pudiste tenerlo todo siendo mi amigo, pero decidiste que no era suficiente»El recuerdo de las palabras de Blake fueron un duro golpe para Scott, porque no era más que la verdad, lo había tenido todo, pero creyéndose el hijo mayor de Henry, su primogénito, pensó que merecía más ¡Que lo merecía todo!El grito que abandonó la garganta de Scott Carter fue doloroso, fue una lamentación nacida de lo más profundo de su alma y lo peor es que n
SorpresasHope sonrió al escuchar la euforia en la voz de Blake y es que el bebé dentro de su cuerpo solía moverse a menudo, pero se había resistido a hacerlo cuando Blake le hablaba. Cada vez que Blake colocaba la mano sobre su vientre, el bebé dejaba de moverse, razón por la que Blake Cameron se mostraba tan feliz y al borde del llanto.—Es maravilloso —dijo, su tono de voz era indescriptible, pero si Hope tuviese que ponerle un nombre sería sin lugar a dudas tono de voz lleno de amor.—Lo es —susurró Hope y como si el bebé supiera el efecto que estaba causando en su padre, continuó dando un concierto de movimientos, Blake no sabía si eran pataditas o puños, él simplemente se dedicó a disfrutar de aquel bello e íntimo momento que no duró tanto como a Blake le hubiese gustado, pues Chelsea y Larry hicieron su arribo.—¡Hola! —saludó Chelsea con una sonrisa de oreja a oreja.—¿Por qué tan feliz, te has ganado la lotería o algo por el estilo? —preguntó Hope con el ceño fruncido por la
¡El bebé está llegando!Bárbara frunció el ceño al ver a la mujer parada en la puerta, estaba callada como si no esperaba encontrarla allí.—Buenos días, ¿puedo ayudarle? —preguntó Bárbara el tiempo que escuchaba los pasos apresurados de James, bajar por las escaleras, ellos tenían una charla pendiente, pero sería después que la desconocida se marchara.—De hecho, lo buscó a él —señaló.Bárbara se giró para ver a James, él tenía el ceño fruncido y su mirada era fría.—¿Qué haces aquí? —preguntó, caminando hasta pararse junto a Bárbara.—Te lo dije anoche… —pronunció dejando palabras al aire.Bárbara elevó una ceja, dio un paso atrás de manera inconsciente, algo que Elizabeth pensaba aprovechar.—¿Te gusto mi regalo? —preguntó—. La tuve guardad mucho tiempo y creí que sería bonito que tuvieras una —se apresuró a decir.Bárbara escuchó en completo silencio, mientras su corazón se estrujaba dentro de su pecho al comprender el motivo por el cual James no había llegado a tiempo para la cen
Bienvenida al mundo «¡El bebé está llegando!» Chelsea no estaba preparada para esto, la primera vez que Hope había dado a Luz, fue James quien estuvo en ese momento decisivo, ¿por qué le tocaba a ella justamente antes de su boda? La pregunta no obtuvo respuesta, por lo menos, no como lo esperaba. El grito de Hope le hizo dar un susto de muerte. —Espero no dar a luz en el auto —se quejó Hope, presionando su mano sobre el muslo de Chelsea, la rubia ahogó un gemido ante el dolor en su pierna. —¡Espero que no! —gritó asustada, mientras buscaba avanzar entre los vehículos para abrirse paso y llegar pronto al hospital. Chelsea presionó el claxon más veces de las que recordaban, mientras Hope, entre gemidos, suspiros y gruñidos, enviaba un mensaje a Blake. —¿Por qué hoy? —preguntó Chelsea en voz alta. —Porque tu sobrino o sobrina no quiso esperar y debe estar impaciente para verte caminar al altar —intentó bromear Hope, mientras hacía largas respiraciones, recordando los ejercicios re